Tiempo de castañas
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La tierra siempre ha sido de buen caudal.
Donando cantidad de frutos,
confidente de nuestra gastronomía,…
acariciémosla.
Gracias a ella no hay hambre,
Y aquello que nos ofrenda…
en eso consta el tesoro oculto de tantos siglos.
La época de la castaña se muestra ante nosotros con un olor
otoñal. Nuestros antepasados apenas tenían con que pagar, pero la tierra
siempre ha otorgado lo que ha podido. Y ahora, a pesar de adelantarse, la
tierra ofrece su donativo con la castaña. Siempre se ha conocido las castañas
asadas, el pastel de castañas, la salsa de castañas,… Es más aún hay quien come
pan de castañas. Sin embargo, en época de miseria, era parte de los alimentos
del día a día de está estación del año. Las castañas era el alimento de
cualquier mendigo y gracias a esta conseguían la grasa y proteína suficiente
para trabajar. A día de hoy, existen miles de alimentos diferentes pero… ¿por
qué no mantener las antiguas costumbres?
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